Estrenamos sillita

Llevo varios días intentando pasar por aquí, pero con tanto virus mi papel de mamá enfermera me tiene completamente absorta. Me moría de ganas de preparar este post y enseñaros nuestra nueva adquisición, por eso hoy, aprovechando una pequeña tregua que nos ha dado la fiebre, me lanzo a contaros nuestra pinión sobre el nuevo miembro de la familia, porque ya en casa es uno mas 😉

Hasta hace unos días el carro de Guillermo era un Bugaboo camaleon 3. Lo escogimos porque nos gustaba su diseño, por las buenas críticas y como no, por su gran repertorio de combinaciones textiles. El nuestro era la edición Classic en gris melange. Le hemos sacado mucho partido, hemos viajado, paseado, nos lo hemos llevado a la playa, al campo… Nos ha acompañado en miles de momentos.

Cuando lo compramos nos parecía tan perfecto que cometimos un error de novatos al no comprobar las dimensiones del carrito plegado con las del maletero de mi coche. Mi clio pasó de tener cinco plazas a cuatro, porque el capazo tenía que llevarlo en el asiento delantero (se que no es lo mas seguro pero no había otra forma de llevarlo). El chasis cabía a duras penas en el maletero, siempre y cuando le quitásemos una de las ruedas traseras.

Con el cambio del capazo a la silla volvimos a tener un coche de cinco plazas pero esta vez sin maletero, porque el conjunto lo ocupaba todo.

La suma de estos y otros inconvenientes nos llevaron a usarlo cada vez menos. Era una lástima verlo «aparcado» en casa, completamente nuevo y como cambiar de carro sale mas barato que cambiar de coche, lo pusimos en venta y comenzamos a buscar sillitas rápidas, porque ir sin carro con un bebé de 15 meses no era una opción. Como nuestra joyita estaba como nueva y muy bien cuidada, no tardaron en lloverle candidatos. Una semana nos duró el anuncio puesto.

Tocaba encontrarle sustituto y para ello hice una pequeña lista con los requisitos a tener en cuenta a la hora de escoger uno para no volver a caer en la tentación de dejarnos llevar solo por «lo bonito».

-Plegado tipo libro

-Posibilidad de poner el asiento en ambos sentidos

– Asiento cómodo y reclinable completamente

– Ágil y manejable (a ser posible que pese poco)

Si, se que pido mucho, pero es el quinto carrito que compro (Alejandro tuvo tres y Guille ya va por el segundo), como veréis tengo experiencia en esto de ir cambiando de sillas y no quería que hubiese un sexto, mas que nada por no tener al papi chulo despotricando de mis manías o mi afición a las compras. Pero ahí estaba Max Barenbrug (creador de bugaboo) una vez mas para diseñar mi carro ideal y cumpliendo con todas mis exigencias, que es lo mas importante.

Bugaboo bee 5 ese carro del que tan mal había hablado yo hace unos años «que feo», «¿a quien le puede gustar eso?»…

¡Que superficial! En cambio ahora me tiene totalmente enamorada, si es que ya lo dice mi abuela «nunca digas de este agua no beberé». Escribiendo esto me doy cuenta de que es mi quinto carro y es un bee 5, todo son señales (yo y mis señales como dice el papi chulo). Últimamente recibo muchas, pero de eso ya hablamos otro día.

Una vez decidido el modelo tocaba escoger combinación, pobre dependienta, con lo indecisa que puedo llegar a ser. Tenía claro que el chasis lo quería negro y el textil debía de ser fácil de combinar con los complementos que ya tenía. Tentada estuve de volver a elegir el gris melange porque sigo loquita de amor por el, mira que hay hasta 792 combinaciones posibles, entre ellas llantas y manillar, pero por variar me decanté por el total black. Como se suele decir «el negro siempre es un acierto».

Pero dejemos lo bonito a un lado y vamos a lo importante; las diferencias entre ambos modelos.

El bee es mucho mas ligero y manejable que el cam, se lleva estupendamente con una sola mano y su plegado en una sola pieza es ideal.

Sus dimensiones también son mas pequeñas, algo de agradecer a la hora de callejear por las aceras estrechas de mi pueblo. El manillar del bee no tiene olgura y eso da sensación de seguridad (al menos a mi). En el reclinado también sale ganando el bee, con una sola mano lo pones en la posición que quieras, en cambio con el cam necesitas las dos y si me apuras, también la rodilla. Ambos tienen 3 posiciones. Según mi criterio en lo que sale ganando el cam es en las ruedas, con las suyas bajar y subir escalones es mucho mas fácil que con las del bee, pero por todo lo demás, a día de hoy me quedo con mi Bee5.

Si es cierto que los precios de ambos modelos no son nada económicos pero es cuestión de valorar si merece la pena hacer el gasto o no, ya eso va según el criterio de cada uno. Prometo que a mi Bugaboo no me ofrece nada por escribir este post, pero me apetecía contaros mi opinión.

El saco es de la marca Fuli&C es el que compramos para el cam y queda igual de bien en nuestro nuevo bee, además de ser calentito y muy practico al tener cremallera central para poder sacar fácilmente al niño.

Una vez mas gracias por leerme y perdón por la ausencia.

Besos, Mariloli.

Categorías Recomendaciones

Deja un comentario

search previous next tag category expand menu location phone mail time cart zoom edit close